Necesitamos aprendices ágiles.
¿Piensas que unos alumnos tienen una gran capacidad y por ello consiguen tener buenas notas? Y por otro lado ¿Piensas que otros no tienen esa capacidad y por ello tienen más dificultades?
Lo más interesante de todo esto es que en muchos casos, los alumnos que demuestran un gran éxito en el “juego” de la escuela, sacan buenas notas y tienen un buen comportamiento, no tienen asegurado el éxito en la vida.
Cada vez se escucha con más frecuencia la frase: Tenemos que preparar a los alumnos para el futuro.
Pero nadie puede adivinar cómo será exactamente el futuro. Podemos hacer unas cuantas previsiones: Nuestros alumnos cambiarán varias veces de trabajo, utilizarán tecnologías que todavía no han sido inventadas y tendrán que resolver problemas que no podemos ni imaginar.
En el mundo de la empresa, se han nombrado estos cambios como “disrupciones”.
Las disrupciones, son problemas que han interrumpido la forma actual de trabajar.
En las empresas estas disrupciones ocurren cuando: Una nueva tecnología aparece, se crea una nueva start up que actúa de una manera diferente o el entorno político cambia.
Se produce un cambio que no se esperaba, por lo que la empresa se vuelve inestable y se tiene que adaptar o desaparecerá.
Un claro ejemplo de estas disrupciones son la aparición de empresas como: Bla Bla Car, Airbnb, Uber o Wallapop.
Todas esas empresas han supuesto un cambio en su sector y las empresas o se adaptan o acabarán por desaparecer.
Para responder a estas disrupciones, las empresas están empezando a utilizar sistemas ágiles, estos sistemas les permiten ser flexibles y adaptables. Y su objetivo es ser lo suficientemente ágiles para poder responder rápidamente a los cambios y oportunidades.
Ahora te preguntarás ¿Para qué esta introducción al mundo de la empresa?
Creo que esto tiene que servir de inspiración para las personas que nos dedicamos a la educación.
Los maestros tenemos que marcarnos como objetivo preparar a nuestros alumnos para que sean aprendices ágiles.
Como dice James Anderson:
“Preparar a nuestros alumnos para un mundo de cambio y disrupción significa que debemos enseñarles que hacer, cuando no hay una norma sobre que hacer.”
Las personas que tienen éxito en su campo de especialización, resuelven problemas sobre los que la solución no es aparente. Es decir encuentran soluciones creativas.
¿Qué es la inteligencia?
Ahora quiero compartir contigo una metáfora que a mi me ayuda mucho a comprender la inteligencia y nuestro rol como maestros.
Edward de Bono compara la inteligencia innata con un coche que conduces.
Cada uno de nosotros nace con un diferente nivel de inteligencia. Algunos nacen con un poderoso Ferrari y otros han nacido con un menos poderoso Seat 600.
El tipo de coche con el que naces es importante, pero no es más importante lo bien que aprendes a conducirlo. Un conductor habilidoso y efectivo en un Seat 600 será más exitoso que un conductor menos habilidoso en un Ferrari. Especialmente si ellos se enfrentan con tareas complicadas.
Aunque las personas no pueden cambiar el coche con el que nacen, si pueden mejorar las habilidades de conducir, particularmente con un buen entrenamiento.
El éxito que experimentamos en la vida es el resultado del coche con el que nacemos, tanto como las habilidades de conducción. Bono argumenta que el factor de mayor influencia son las habilidades con las que aprendemos a conducir.
Cuando encontramos una tarea sencilla, podemos arreglárnoslas con nuestro talento natural.
Si la carretera es recta y nuestro coche es poderoso, lo hacemos bien. Sin embargo, los retos más complejo requieren grandes habilidades.
En una carretera de montaña, con curvas, cambios de superficies y obstáculos un coche rápido no es suficiente. Se necesita un conductor habilidoso.
Las investigaciones sobre la mentalidad de crecimiento nos muestran que los maestros, no podemos cambiar el motor, pero si podemos enseñar a los alumnos a ser más habilidosos conductores, haciendo que se conviertan y se comporten de manera más inteligente.
Por ejemplo puede existir un escenario de una carrera donde un habilidoso conductor en un Mini compita contra un desentrenado y poco habilidoso conductor de un Ferrari.
En una pista de carreras fácil, como una línea recta, el coche más potente batirá al conductor entrenado. Sin embargo, en una pista de carreras más compleja, en carreteras reales, con obstáculos y curvas peligrosas, el conductor menos habilidoso rápidamente chocará y será incapaz de terminar la carrera.
El conductor habilidoso incluso con un coche menos potente será capaz de ganar la carrera.
El mundo real necesita que los conductores sean habilidosos para enfrentase a las complejidades de vida actual. (Recuerda que el mundo al que nos enfrentamos en la actualidad, esta en constante cambio)
Para poder prepara a tus alumnos para que se conviertan en “conductores habilidosos” los maestros tenemos que elegir entre estos dos roles para actuar en nuestras aulas:
Maestro instructor de autoescuela.
Siguiendo con este ejemplo, el rol del maestro se convierte en enseñar a los alumnos a conducir sus “coches” de manera más efectiva, aprender a comportarse de manera más inteligente, según el contexto. Esto significa planificar y estructurar experiencias de aprendizaje que permitan aprender como ser un "conductor" efectivo.
Maestro guía turístico.
Los guías turísticos planifican la ruta que van a enseñar, puede ser una ruta de lo más atractiva, explican cada uno de los punto de interés y pueden responder todas las dudas, pero el maestro que asume ese rol no da opción al alumno de coger las riendas.
En un mundo en constante cambio, enseñar una ruta turística no es el objetivo, la zona cambiará, habrá alumnos que quieran explorar otros recorridos o que quieran profundizar en la ruta. Por lo tanto lo mejor es enseñar a conducir. Para que cada alumno pueda sacar el máximo rendimiento a su vehículo.
Necesitamos entrenar a los alumnos para que sean aprendices ágiles. Que sea capaces de conducir sus vehículos, sacando el máximo rendimiento.
¿Cómo convertir a los alumnos en aprendices ágiles?
Creo que el rol de los maestros del siglo XXI es actuar como instructores de autoescuela, acompañar a nuestros alumnos para que aprendan a conducir y que después sean capaces de emprender su propio camino.
Para ello hay tres elementos que preparan a los alumnos para ser aprendices ágiles: Los hábitos de la mente, la mentalidad de crecimiento y la práctica deliberada.
16 Hábitos de la mente
Los hábitos de la mente es lo que Art Costa y Bena Kallick han encontrado en un estudio de las personas que tienen éxito en los distintos campos de especialización.
Sus estudios nos dan la información de cómo esos habilidosos “conductores” utilizan sus mentes. Para ello han identificado 16 hábitos que comparten estas personas.
Lo importante de todo este proceso es que estos hábitos pueden entrenarse y preparan a nuestros alumnos para resolver problemas, cuya solución no es aparente.
Estos son los 16 hábitos:
- Persistir en las tareas.
- Manejar la impulsividad.
- Escuchar con empatía y con comprensión.
- Pensamiento flexible.
- Reflexionar sobre el propio pensamiento (metacoginición).
- Luchar por la precisión.
- Aplicar los conocimientos previos.
- Hacerse preguntas y plantear problemas.
- Pensar y comunicar con claridad y con precisión.
- Recopilar, a través de todos los sentidos, la información percibida.
- Crear, Imaginar e Innovar.
- Responder con asombro y admiración.
- Ser capaz de asumir riesgos responsables.
- Desarrollar el sentido del humor.
- Pensar de forma global e interdependiente.
- No dejar de querer aprender (Lifelong learner).
Pero la doctora Carol Dweck, a través de su trabajo estudiando la influencia de la mentalidad, ha encontrado que enseñar hábitos para el éxito, tiene un gran impacto, si se enseña después de que los alumnos entiendan la plasticidad del cerebro. Por lo tanto, esto ha llevado a identificar con mentalidad de crecimiento, a aquellas personas que entienden y creen que tienen la posibilidad de cambiar sus características, incluyendo los talentos, las habilidades y la inteligencia.
Mentalidad de crecimiento
La mentalidad de nuestros alumnos, es decir sus creencias sobre las características de sus talentos, habilidades e inteligencia, afectan a su motivación, a su oportunidades y en definitiva a sus logros.
En su estudio la doctora Dweck describe dos mentalidades: Mentalidad fija y mentalidad de crecimiento.
Las personas con mentalidad de fija se caracterizan porque tienen una creencia central de que la inteligencia, las habilidades y el talento son fijos y estáticos. Se nace con ellos y no pueden ser desarrollados.
Por otro lado las personas con mentalidad de crecimiento se caracterizan por la creencia de que la inteligencia, las habilidades y el talento se pueden desarrollar.
Este tipo de mentalidades se desarrollan basándose en las experiencias que viven los alumnos, dependiendo de las vivencias que tengan se posicionarán en un lado o en otro.
Los alumnos que desarrollan la creencia fija, evitarán exponerse ante situaciones en las que consideren que pueden fallar y por lo tanto mostrar que no tienen esas habilidades. El recurso más común es huir de los desafíos.
Mientras que los alumnos con la mentalidad de crecimiento ven en los retos una oportunidad de crecer, por lo tanto ante las dificultades, se motivarán, ya que entienden que es lo que les hace mejorar.
Nuestros alumnos son condicionados por el entorno, las experiencias, la forma en la que nos comunicamos con ellos y nuestra propia mentalidad, les lleva a tener una mentalidad fija o de crecimiento.
Entrenarlos en la mentalidad de crecimiento les permitirá amar los desafíos y por lo tanto disfrutar aprendiendo.
Práctica deliberada.
Anders Ericsson ha estudiado el tipo de actuación que siguen las personas para mejorar su potencial en cualquier campo de actuación.
Cuando realizamos una nueva tarea podemos clasificarla en dos categoría:
- Cosas fáciles que no hemos realizado antes.
- Cosas difíciles que no hemos realizado antes.
En el primer caso hacer tareas nuevas es diferente, pero no difícil. Aprendes a hacer más cosas pero no aprendes a hacer cosas más difíciles.
En el segundo caso cuando trabajamos en realizar cosas complicadas que no hemos realizado anteriormente, no simplemente estamos aprendiendo a hacer más, estamos aprendiendo a hacerlo mejor.
En este último caso nos enfocamos en actuar fuera de la zona de confort, actuamos en la zona de aprendizaje.
Actuar en la zona de aprendizaje es lo que nos permite mejorar nuestro potencial y es lo que tenemos que buscar en nuestros alumnos.
Preparar a nuestros alumnos para un futuro en constante cambio no es una tarea fácil, no tenemos una receta mágica, pero si podemos entrenarlos para que sean aprendices ágiles.
Los aprendices ágiles reconocen que viven en un mundo cambiante, impredecible y disruptivo.
Tenemos que preparar a nuestros alumnos para que comprendan que tienen la capacidad de cambiarse a si mismos (mentalidad de crecimiento). Que pueden desarrollar los hábitos de la mente y aprender a comportarse de manera más efectiva. Todo esto les permitirá practicar de manera deliberada, dirigiéndolos hacia el éxito frente a los nuevos problemas que encontraremos en el futuro.
Tú como maestro tienes que plantearte que rol vas a tomar, ¿quiere ser un guía turístico? o ¿quieres actuar como instructor de autoescuela?.
El rol que elijas preparará o no a tus alumnos para que puedan conducir sus vidas hacia el éxito.
Me ha gustado mucho la metáfora del tipo de coche para describir el tipo de maestro (instructor o guía turístico). Respecto a los 16 hábitos de la mente, los veo para planificar y tener en cuenta en los equipos educativos; de forma que cada materia contribuya a ellas y, sobre todo, en la tutoría. Cuando tienes un currículo concreto (matemáticas, en mi caso) es complicado atenderlos todos; aunque desde luego veo necesario tenerlos muy en cuenta; en tanto hay que dar prioridad absoluta a la resolución de problemas, por encima del hacer ejercicios típicamente algorítmicos.
Hola Mª Carmen, mi manera de ver los 16 hábitos, es una guía sobre lo que tenemos que entrenar, y luego cada una a través de su asignatura aprovechar los contenidos como medio para practicar y desarrollar esos hábitos.
Creo que si se ha demostrado que las personas que tienen éxito (entendiendo éxito con que consiguen sus propósitos) tienen en común esos hábitos, veo necesario que sean tenidos en cuenta en la aula.
Muchas gracias por aportar con tu comentario. Un saludo.
Gracias por tu articulo. En la exposición final del congreso me gustó mucho esta comparación de los coches. No la conocía. Me encanta aprender, llevo trabajando como profesora 18 años y de forma inclusiva. Proyectos, gamificación, grupos cooperativos…
Me ha encantado conocer a tantos profesionales revolucionari@s.
Muchas gracias por tu comentario Pilar, el rol de maestro del siglo XXI, tiene que estar más ligado a acompañar que a dar las soluciones. Me alegra conocer que hay muchos docentes con ganas de aprender y poniéndolo en práctica. Un saludo
Estoy muy contenta de recibir tan interesantes artículo y hoy todavía estaba terminando de hacerme un resumen del tema de ayer y esperaba poder leer y disfrutar el de hoy, mil gracias por compartir y enseñarme tanto… bendiciones…
Hola Ana, me alegra mucho que estés tratando estos artículos con tanto interés y sobre todo que te sean de utilidad. Muchas gracias por tus palabras.
Obrigado Juan Fernández elos seus artigos são muito valoroso para os profissionais da educação.
Muchas gracias por tus palabras! Un saludo
Felicitaciones Juan, desde Chile un fraternal saludo y muy agradecida por tus excelentes y didacticos articulos.
Me gustó mucho la comparación de los coches, esto significa que debemos planificar y estructurar experiencias de aprendizaje que permitan aprender como ser un “conductor” efectivo, hábil capas de llegar a donde quiere y poder alcanzar sus objetivos. Excelente articulo.
El futuro hoy no sabemos cuando empieza por la manera en que cambian las cosas hoy, la incertidumbre es la constante, no creo que tengamos una formula única para preparar los niños al futuro como la película en que el capital y su tripulación se metían a una capsula y viajaban en el tiempo. Pero si de algo estamos convencidos es que en lo que si tenemos que preparar a los niños es para que nunca pierdan su humanidad tan en peligro por la robotizacion.
Excelente articulo para la reflexión de nuestra práctica docente.Gracias por compartir tus conocimientos y experiencias.Gracias desde venezuela
Juan, excelente mensaje, definitivamente debemos continuar cambiando nuestra formas de educar a nuestros niños y jóvenes, ellos tienen muchos talentos que tenemos que descubrir para que la educación descubra nuevas paradigmas para un futuro mejor, debemos convertir a nuestros estudiantes en protagonistas de un aprendizaje significativo. voy a releer sus artículos par profundizar en ellos y llevarlo a la práctica, Felicitaciones por compartir estos profundos artículos.
Hola Juan este articulo es fantástico, comprendes de inmediato como debe ser el rol del maestro o profesor, pero nos falta mucho por caminar, sobre todo en países como el mío donde la escuela no cambia y sobre todo no tiene un rumbo un fin.
Realmente felicitaciones por el artículo, ojalá llegara a más profesores que los haga meditar y cambiar para mejorar su forma de enseñar.
ME HA GUSTADO MUCHO EL ARTÍCULO, ME ENCANTA CÓMO LO RELACIONAS INDIRECTAMENTE CON LA INTELIGENCIA EMOCIONAL Y CÓMO ELLOS MISMOS SON LOS PROTAGONISTAS DE LOS APRENDIZAJES.
Buen día excelente articulo muy interesante, gracias por compartir este artículo lo pondré en practica para mejorar el aprendizaje de mis alumnos.
Gracias por el material. Me gustó mucho.
Y lo doy a mis alumnos.
Una reflexión a mi parecer indispensable y muy bien expresada la que tú haces, llegando al quid de la cuestión que debemos plantearnos cada uno como docente. Los 16 puntos me resultan muy útiles: tomo nota. ¿Algún libro que aconsejas para profundizar en el tema?
¡Gracias!
Hola Juan! Solo puedo felicitarte por esta publicación, es sencillamente estupenda. Me ha encantado la idea de explicarles a los niñ@s cómo funciona el cerebro, es cierto que si conocen su plasticidad serán conscientes de que aquellas cualidades que les acompañan y quieran cambiar, tendrán la posibilidad de ser mejoradas. Tomando nota para adquirir mejores hábitos y poderlos trasladar a nuestr@s peques.
Un millón de gracias
Muchas gracias por tu comentario Verónica, es así hay principios que se deben enseñar en la escuela y más teniendo en cuenta esta realidad de la plasticidad del cerebro nos empodera y nos lleva al crecimiento. Poco a poco esto será la realidad en nuestras aulas.
Hola Juan! Te felicito por tu artículo, me otorga muchas herramientas para continuar mejorando mis prácticas de enseñanza y ver en mis alumnos esas habilidades y cualidades que ellos creen no tenerlas. Tal cual, como vos decís, el cerebro es un músculo y debemos ejercitarlo día a día para salir de la zona de confort. Desde ya… Muchas gracias!!
Hola, Juan, Me gusta bastante como redactas y explicas todo con mucha claridad y sencillez. Muchas gracias por compartirlo.
Hola Juan, me ha encantado lo que en el artículo manifiestas.
Concuerdo contigo en que no siempre el estudiante que obtiene buenas notas es el mejor. Se ha visto en muchos casos, que los que menos se dedicaron a los estudios y obtuvieron calificaciones no tan buenas, han tenido más exito en su vida que aquellos que se dedicaron más a sus estudios.
En el campo de la Educación, siempre nos vamos a encontrar con estas dos clases de estudiantes. Somos nosotros, y directamente los miembros de la familia y el entorno en sus hogares lo que va a incidir en que el ser humano logre vencer obstáculos, avanzar, perseverar y alcanzar.
Siempre les he dicho a mis estudiantes que no todo les será fácil en la vida, que hay que aprender a solucionar para lograr todo lo que nos propongamos.
Mas que todo a aquellos que todavía tienen madres y padres sobreprotectores, y que les solucionan todo y que no les permite ser ellos mismos. No porque no quieran, sino porque muchas veces el actuar de los padres se los impide.
Con una sociedad así, nosotros los educadores nos encontramos con esta brecha que muchas veces nos impide poder ayudar a nuestros estudiantes, orientándolos y preparándolos para lo que se encontrarán en el futuro. Aún así, nunca es tarde para insistir y lograr.
Estoy muy agradecida con tus aportaciones que actualmente estoy empezando a leer, las que desde ya, estoy recomendando a mis compañeros y amistades.
Mucho éxito en tu vida!
Gracias Mirella por tus palabras! Estamos en un proceso donde el cambio es constante y los que nos dedicamos a la educación tenemos que elegir o preparar a los alumnos para que sean aprendices ágiles o seguir formando alumnos para que sientan que aprender es un simple tarea, en lugar de una oportunidad. Cada uno elige cada día con su actitud donde se situa. Gracias de nuevo. Un fuerte abrazo.
Buenos días Juan, aunque en España tienen otro horario, desde aquí Chile, un millón de gracias por tu escritos, es para mi una fortuna haberte encontrado gracias a un magister que estoy realizando como estudiante y tus palabras claras precisas sobre todos los aspectos de la enseñanza-aprendizaje me han ayudado a entender el proceso. Muy agradecida por tus enseñanzas. Un saludo cordial
Felicitaciones, contenido ilustrativo no solo para docentes, sino lo comparti a padres y estudiantes, gracias