Desde el momento en el que descubrí el coaching educativo, rápidamente me di cuenta de todas sus posibilidades dentro de un aula y empecé a usarlo como método para empoderar a los alumnos.
El coaching es una herramienta poderosa que se basa en facilitar métodos de aprendizaje y estrategias para el autoconocimiento de uno mismo. A través del coaching podemos aprender a apoyarnos en nuestros recursos y habilidades y encauzarlos hacia la realización de aquello que exprese nuestro verdadero potencial.
El coach es simplemente un acompañante del proceso, no está por encima del coachee, no dirige, no presiona, no impone, sino que te muestra las puertas para que autoreflexiones, te des cuenta de quién eres, de qué pensamientos te limitan y cuáles te empoderan. Las técnicas de esta metodología te invitan a la autoescucha, a mantenerte aquí y ahora relacionándote con el entorno e interaccionando con él desde el dinamismo, la seguridad personal, la motivación y el compromiso.
El tipo de educación a la que estamos acostumbrados consiste en que se enseña exactamente lo mismo a todos los alumnos, se les motiva igualmente unos a otros, no se invita a pensar, sino a asumir y aceptar. Se resta la capacidad de iniciativa y acción de la persona. ¿Te imaginas una metodología que tenga en cuenta las habilidades y aptitudes de cada alumno? ¿Te imaginas una metodología que en lugar de limitar tu potencial, te inspire a desarrollar tu creatividad?, ¿que aumente tu motivación por aprender a través de las experiencias aprendiendo de los errores y de las victorias?, ¿que desarrolle la capacidad plástica de tu mente y adaptabilidad?, ¿que te aporte la capacidad de cambiar de perspectiva, de encontrar nuevos caminos? Esto es el coaching educativo.
Y, ¿cuáles son sus beneficios reales?
Los beneficios que te aporta el coaching educativo son muchos, estos son algunos de ellos:
– Tomas conciencia de tus pensamientos limitantes y tus creencias a través de la autoindagación y la autoescucha.
– El empoderamiento se produce a través de las habilidades que adquieras para utilizar el conocimiento, en lugar de a través de la cantidad de conocimiento que posees.
– Mejoras la capacidad de realizar feedbacks con el entorno, digamos que aprendes a establecer un diálogo con la vida.
– Desarrolla la inteligencia emocional, lo cual te permite gestionar de manera eficiente estados de estrés y ansiedad en el trabajo, manteniendo una mente clara y enfocada.
– Máximo desarrollo personal y profesional.
– Promueve cambios cognitivos emocionales y conductuales.
Características que debe tener un educador que actúa como coach para empoderar a sus alumnos
El cómo empoderar a mis alumnos debe ser la pregunta clave de un coach educativo. La cualidad principal de un coach debe ser haber pasado él mismo por un proceso de autoconocimiento y transformación que le haya aportado el conocimiento experiencial necesario para guiar a los alumnos por el mismo camino. Digamos que un coach es como un guía de aventuras, tiene un grupo de personas a las que dirigir a un lugar extraordinario, pero ese viaje está lleno de aventuras y peligros. El grupo debe confiar en su guía porque intuyen a través de su presencia y seguridad que ya ha estado ahí en varias ocasiones y que conoce perfectamente los diferentes caminos que llegan al objetivo.
Desgraciadamente no todos los coach están preparados para guiar a otras personas (aún). La figura del coach es tan reciente y desconocida como necesaria, pero aún no está del todo definida, ¿cómo nace un coach?. La inmediatez de algunos cursos de preparación puede dar fama de “charlatanes” a una profesión que requiere de una preparación profesional y personal que desarrolle al máximo tanto las cualidades personales como profesionales de la persona. Debe, también, desarrollar la capacidad empática de saber leer a sus alumnos, la habilidad de conectar con el aquí y ahora, de facilitar estrategias de autoaprendizaje diferentes para cada persona y de crear las condiciones apropiadas para cada alumno para aprender y crecer.
9 claves de la metodología del coaching educativo
Un buen coach debe conocer profundamente la metodología del coaching educativo que permita empoderar a los alumnos porque ese es el fin último. Estas son algunas de las claves más importantes a seguir:
– Animar, motivar e inspirar al alumno a que resuelva por sí mismo los problemas y aprenda a superar obstáculos.
– Las actividades no deben centrarse en la responsabilidad u obligaciones del alumno, sino en el compromiso, el desarrollo de la mente creativa y la motivación.
– Crear retos y proyectos que desarrollen la independencia y hagan protagonista a los alumnos.
– Fomentar los espacios y momentos destinados a la reflexión.
– Dejar a un lado el sobrecontrol o protección sobre el alumno, en lugar de eso transmitir seguridad a través de la confianza en su capacidad y acción y resolución.
– Hacerles partícipes activos de su propio aprendizaje.
– Mantener presente el feedback o retroalimentación, pues ayuda a tomar conciencia de sí mismos a los alumnos y de sus actuaciones.
– El apoyo a los alumnos debería ser una de las máximas.
– Haz que crean que son capaces de cualquier cosa.
Las sesiones de coaching suelen centrarse en un diálogo basado en el método socrático que consiste en crear un debate dialéctico para la indagación y búsqueda de nuevas ideas, conceptos y prismas. Sin embargo, no sólo debe quedarse en un debate intelectual y mental, la capacidad de acción es importante. La capacidad de crear planes estratégicos en los que las ideas se convierten en hechos, los sueños en realidades y las palabras en verdades aumenta la capacidad de acción real de los alumnos. Y eso es lo que realmente produce la transformación y promueve los cambios emocionales y conductuales. El mundo está lleno de soñadores, pero son muy pocos los soñadores que hacen. La verdadera capacidad de empoderar del coaching educativo es regalar a sus alumnos el desarrollo de esta habilidad.
Como dijo Richard Bach “Aprender es descubrir lo que ya sabes, hacer es demostrar lo que sabes. Enseñar es recordar a otros que saben tanto como tú. Todos somos aprendices, hacedores, maestros”.
Actuar como coach en tus cursos te permite apoyar a tus alumnos para que sean su mejor versión, buscar que cada uno desarrolle sus fortalezas y sea consciente de sus debilidad y que de esta manera pueda aportar valor al resto del grupo. De la misma forma un educador que pasa por un proceso de coaching, experimenta el proceso, toma consciencia de sí mismo se conoce y posteriormente puede aportar su experiencia propia a los alumnos.
¿Qué te parece el coaching educativo? ¿Lo conocías? ¿Qué crees que puede aportar a la educación? Aporta tu opinión en los comentarios.
Excelente artículo, muchas gracias por clarificar lo que es el coaching educativo…
Olga me alegro que sea de ayuda, un saludo.